El manejo de los desechos radiactivos

Por : Rolando Páucar Jáuregui / Físico nuclear

Diario El Peruano.- Se considera residuo radiactivo a cualquier material o producto de desecho, para el cual no está previsto ningún uso, que contiene o está contaminado con radionucleidos en concentraciones o niveles de actividad superiores a los establecidos por las autoridades competentes.

 

Se clasifican en dos tipos: residuos de baja y media actividad, que son aquellos que contienen isótopos emisores beta y/o gamma cuyo período de semidesintegración es inferior o igual a 30 años y no desprenden calor.

 

Se incluyen en este grupo las herramientas y diversos materiales empleados en centrales nucleares, jeringas, guantes y material médico diverso en los servicios de medicina nuclear y radioterapia, fuentes radiactivas usadas en la industria, restos biológicos contaminados procedentes de los ensayos en los laboratorios de investigación.

 

Por su parte, los residuos de alta actividad: son aquellos que contienen isótopos emisores alfa cuyo período de semidesintegración es superior a 30 años y pueden desprender calor. Son generados en centrales nucleares y están constituidos por el combustible gastado.

 

En el caso de la explosión en el complejo Marcoule, de Francia, éste ha ocurrido en un horno de fusión de metales de baja y muy baja intensidad del Centro de Tratamiento y Acondicionamiento de Residuos de Baja Actividad. No es una central nuclear y está dedicada al tratamiento de residuos radiactivos mediante la fusión de residuos metálicos, o mediante la incineración de residuos orgánicos.

 

Estos residuos, en su mayoría, proceden de servicios de medicina nuclear, en donde usan el yodo-131 y el tecnecio-99.  En el caso del yodo, su  período de semidesintegración es de 8 días, y en el caso del tecnecio, de 6 horas. Esto quiere decir que deben seguirse, pese a su baja actividad, protocolos de disposición y eliminación de desechos radiactivos según norma expresa.En el Perú, por ejemplo, no contamos con normas en medicina nuclear.

 

Es de resaltar que estas instalaciones de tratamiento y acondicionamiento de residuos cuentan con procedimientos de emergencia, los que son activados de manera inmediata al presentarse incidentes como el sucedido en Francia. Esto confirma, una vez más, que los sistemas de seguridad en profundidad en instalaciones radiactivas funcionan y que la ingeniería nuclear es válida.