Después de Fukushima

CÓMO RECUPERAR LA CONFIANZA MUNDIAL CÓMO RECUPERAR LA CONFIANZA MUNDIAL

Rolando Páucar Jáuregui Físico nuclear

Diario Oficial El Peruano.- Luego del accidente de Fukushima, la industria nuclear ha debido enfrentar grandes dudas en algunos sectores de la sociedad acerca de su uso seguro como fuente energética.

Por un lado, los debates que consideran que la central nuclear de Fukushima Daiichi estaría deficientemente diseñada, que las medidas de seguridad no fueron suficientes y no se previno desastres naturales.

 

Otros afirman que hubo corrupción y negligencia de las autoridades japonesas del sector nuclear y que las consecuencias radiológicas de este accidente serán de gran magnitud.

 

Estas son tan solo algunas de las tantas interrogantes que deberán ser absueltas para evitar perder, si no es tarde aún, algo que ha costado mucho esfuerzo y tiempo mejorar, la confianza del público.

 

Lo que sucedió en Fukushima podemos resumirlo de la siguiente manera: hubo un terremoto de magnitud 9.0 que creó un tsunami con una ola de aproximadamente 14 metros de altura, las paredes para contener el agua tenían 10 metros de altura. Con el terremoto, los reactores se apagaron y cuando llegó la ola del tsunami barrió con todos los generadores diésel y con las fuentes de energía de la red eléctrica, lo que causó el corte de la corriente alterna.

 

Había baterías de corriente continua que estaban diseñadas para durar ocho horas, pero al apagarse la electricidad, el reactor empezó a calentarse, se levantó la presión del agua, hubo reacciones de oxidación del combustible, que generó hidrógeno, y esto hizo una reacción isotérmica, que terminó en una explosión de hidrógeno en el área, lo cual causó la mayor parte del daño.

 

Evidentemente, Fukushima, así como lo fue Chernóbil en su momento, ha significado para la industria nuclear un antes y un después, por lo que la pregunta cae por sí sola: ¿los países que decidieron incluir la opción nuclear dentro de sus matrices energéticas continuarán apostando por ella?

 

Pese a todos los pronósticos y en vista de que las razones de seguridad energética, económica y ambiental no han cambiado para estos países, consideramos que la respuesta es afirmativa. 

 

Pero no será fácil para la energía nuclear mantenerse como alternativa energética si no recupera la confianza mundial, algo que tomará tiempo y solo lo logrará mostrando un desempeño de primer nivel, con niveles de seguridad mucho más altos de los que actualmente tiene, demostrando fehacientemente que las centrales son capaces de soportar los peores eventos naturales e informando al público, de manera veraz, oportuna y adecuada, sobre los beneficios y riesgos de la energía nuclear.